7 de marzo de 2015

María Clara González: Desamor


Las razones
que tuve para amarte
se borraron anoche
en la tormenta.
Quedé limpia.
Tu olor a huésped,
voluptuoso en mis entrañas,
se enredó con la lluvia,
y se marchó.

-De “Pulso interno”-


3 de marzo de 2015

Se preguntó el poeta





 
¿Duele el amor?
Se preguntó el poeta
soñando en desesperanza.
¿Acaso dejará  una marca
al morder una esquina del alma?

...Y quiso cerrar los ojos,
mecerse en la brisa del olvido,
dejar atrás la sombra y su penumbra
y alumbrarse por entero en su delirio.



              -Verónica Calvo-

-Imagen tomada de la red-

18 de febrero de 2015

Tu alma en África



-A la memoria de mi tío Rafael-

Lugar que trenza
el verde hierba
con la piel negra.
Se mete en las venas,
se hace sangre
con la tuya,
y lleva el tambor
en su pálpito. 

Se nutre de la árida tierra,
del sol que deseca las fuentes
y acompasa su latido en ritmos
ancestrales que huelen a fuego,
a piel oscura sobre la hierba
y a noche de luna inmensa.

Quiere poseer el amanecer,
plasmar entre aguas azules
cada paisaje que habita.
Quiere ser aquella planta
arrancada en la penumbra
que al nuevo sol le dignifica.

                                                                             Y quedó prendado de sus aires…
                                                    Y brotó una lágrima al recordarlo…


Verónica Calvo

 -Imagen tomada de la red-

9 de febrero de 2015

Las pequeñas esencias: XX



Muerdo.
Soy peligrosa.
Beso.
Soy peligrosa.
Te beso y te muerdo.
Infecto virus,
lascivia y hasta amor.
¿Ves?
Soy peligrosa.
Puedo infectar amor.


-Verónica Calvo-

5 de febrero de 2015

Rubén Darío: Que el amor no admite cuerdas reflexiones




(A la manera de Santa Fe)

Señora, Amor es violento,
y cuando nos transfigura
nos enciende el pensamiento,
la locura.

No pidas paz a mis brazos
que a los tuyos tienen presos:
son de guerra mis abrazos
y son de incendio mis besos;
y sería vano intento
el tornar la mente obscura
si me enciende el pensamiento
la locura.

Clara está la mente mía
de llamas de amor, señora,
como la tienda del día
o el palacio de la aurora.
Y al perfume de tu ungüento
te persigue mi aventura,
y me enciende el pensamiento
la locura.

Mi gozo tu paladar
rico panal conceptúa,
como el santo Cantar:
Mel et lac sub lingua tua.
La delicia de tu aliento
en tan fino vaso apura,
y me enciende el pensamiento
la locura.

                   Rubén Darío

-Pintura de Remedios Varo-